Este ejercicio permitió el análisis y valoración de manera integral de la operación y el impacto del Sistema Distrital de Cuidado, una apuesta de la ciudad para proveer de servicios sociales y de cuidado a las poblaciones más vulnerables.
Con el fin de realizar una evaluación integral sobre la operación e impacto del Sistema Distrital de Cuidado -SIDICU, y con el liderazgo de la Secretaría Distrital de Planeación, se llevó a cabo una socialización que integró a los diferentes actores sociales interesados, para conocer de manera integral los resultados y recomendaciones de este Sistema en cuanto a los objetivos de reconocer, redistribuir y reducir las responsabilidades de cuidado en la ciudad. El encuentro virtual, que contó con la participación de más de un centenar de personas, proporcionó información relevante y basada en evidencia para la toma de decisiones frente a este Sistema.
Una apuesta que involucra a todos los actores.
Este Sistema, articula el servicio de trece sectores de la administración, mesas locales de delegados territoriales, vincula a la Nación, al sector privado, a los hogares y a la comunidad para cubrir las necesidades de cuidado de una manera corresponsable. Estos servicios abarcan talleres de autocuidado, actividad física, atención psico-jurídica, lavandería, educación flexible, formación complementaria, orientación socio-ocupacional, entre otros; de allí, la importancia de realizar evaluaciones periódicas que permitan acciones de mejora, identificación de fortalezas y debilidades del Sistema, considerando su aporte a los objetivos de Reconocer, Redistribuir y Reducir.
El camino que se ha recorrido
La Evaluación permitió identificar los principales resultados relacionados con la operación del Sistema entre los que se encuentran:
- La articulación entre actores y entidades ha permitido el funcionamiento del Sistema a pesar de los retos que supone la operación intersectorial.
- El Sistema Distrital de Cuidado es altamente dependiente del equipo humano, por lo cual es importante cuidar de este equipo y fortalecer estrategias de gestión de conocimiento.
- El fortalecimiento y transversalización del componente de transformación cultural es un elemento clave para potenciar los impactos del Sistema en el mediano y largo plazo.
Las conclusiones frente a los impactos del Sistema están relacionadas principalmente con:
- El incremento en el tiempo dedicado al cuidado personal y la apropiación de prácticas de autocuidado por parte de las personas cuidadoras es indicativo de su auto-reconocimiento.
- Se evidencia un reconocimiento incremental de la corresponsabilidad de género en las labores domésticas y un aumento en la opinión de que los hombres deben participar en estas actividades. Sin embargo, este cambio no es significativo.
- Las personas cuidadoras perciben redistribución de las cargas de cuidado con el Sistema (Arte de Cuidarte), gracias a esto pueden retomar sus proyectos de vida. En general no hay mayores impactos en redistribución y reducción de las labores de cuidado.
Las recomendaciones estratégicas para un Sistema que avanza
Para los expertos que realizaron la evaluación del Sistema Distrital de Cuidado, y de conformidad con los retos a los que se enfrenta la actual administración con respecto al cuidado, se generaron las siguientes recomendaciones:
- Definir e implementar una estrategia de formación sobre equidad de género, enfoque transformador de género, cuidado, principios y alcances del Sistema Distrital de Cuidado, con todas las personas de todas las entidades que prestan servicios en los diferentes modelos de operación y componentes.
- Generar una estrategia multisectorial que conduzca a la transformación de los comportamientos y la cultura en relación con los roles de género y del cuidado, mediante intervenciones sostenibles, duraderas y continuas, liderada desde el Sistema Distrital de Cuidado como eje articulador de la intervención.
- Ampliar la oferta para personas que requieren cuidado, con el fin de fortalecer el criterio de simultaneidad en la operación, generando nuevos servicios o articulando con otros existentes, en particular para personas mayores y personas con discapacidad.
- Fortalecer la oferta de servicios para personas cuidadoras, para hacerla más pertinente, especialmente en los componentes de formación y de generación de ingresos.
- Incentivar, acompañar y fortalecer la generación de redes de apoyo social que permitan la redistribución comunitaria del trabajo de cuidado.